Un buen sueño
El estilo de vida que llevamos, muchas veces hace que perdamos horas valiosas de sueño. Con la aparición de la luz artificial nuestros patrones de sueños cambiaron para siempre. Antes, el sol regía el momento en que dormíamos, ahora nosotros somos dueños de decidirlo. Aunque es indudable que la electricidad mejoró sustancialmente la vida de las personas, afectó el sueño de maneras que aún hoy estamos comprendiendo. Las actividades de las personas se alargaron en el tiempo, robándole espacio al dormir.
Muchas personas consideran que dormir es algo más por hacer en su día, una molestia que quisieran quitarse de encima. La verdad es que un buen sueño puede hacer maravillas por nuestra salud. La falta de sueño puede llegar a presentar irritabilidad nerviosa, falta de concentración, disminución de la productividad en todos los aspectos de la vida, pérdida de memoria y malfuncionamiento del sistema inmunológico.
El sueño varía de persona en persona, algunos necesitan seis horas, otros ocho o hasta nueve horas. Lo importante es que encuentres el tiempo para ello y lo tomes enserio. Respetar la hora de dormir puede significar una revolución completa en tu vida.
No comas en exceso
Muchos creen que comer bien es comer mucho y no se fijan en lo que comen ni en las porciones con las que se alimenta. En muchos hogares encontramos platos supremamente grandes, comida en abundancia que, a la larga, no resulta todo lo nutritiva que puede ser. Comer en exceso puede traer consecuencias como el sobrepeso, sobre todo en niños. Te recomendamos, en este apartado, tener en cuenta qué es lo que comes y cuánto de ello es saludable para ti.
Natural vs Artificial
Muy unido al punto anterior, solemos consumir muchos alimentos pero casi ninguno es nutritivo. Las personas consumen cantidades enormes de snacks procesadores. Este tipo de alimento es muy sencillo de preparar, fácil de conseguir, económico y adictivo. Por esa razón mucha gente, alrededor del mundo, los prefiere a alimentarse con comida sana como verduras o frutas.
Sin embargo, si volvemos este tipo de alimentación un hábito, podemos sufrir de complicaciones a largo plazo. La obesidad es una de ellas, pero también los problemas cardíacos, vasculares o de riñones. Debemos entender que los alimentos artificiales se encuentran repletos de químicos insalubres, sales y conservantes dañinos para el organismo.
La alternativa se encuentra en lo natural. Los vegetales, frutas y comidas preparadas de forma casera son tu mejor opción para combatir dichos males. Sabemos que quizá no tengas el tiempo suficiente, pero con un poco de esfuerzo tu estilo de vida mejorará visiblemente.
Controla el estrés
El trabajo, la familia, las deudas, los problemas, los límites que nos imponemos son factores que desencadenan el estrés. Somos una sociedad supremamente estresada y esto afecta directamente nuestra salud. Problemas como la ansiedad son más frecuentes hoy en día que en el pasado, y ahora están apareciendo incluso en niños. Lo mejor que podemos hacer es quitar el pie del acelerador un momento, buscar rutinas que no nos golpeen tanto, introducirnos en actividades desestresantes como el yoga o la meditación. La salud mental es muy importante, no la dejes a un lado.
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